La mañana de ayer martes, un derrumbe en calle acceso al Mirador de la comuna de Queilen, afectó a una bodega destinada a la leñera de una casa habitación.
Si bien la construcción principal no sufrió mayores daños, de no mediar una rápida intervención, sigue el riesgo latente de que el terreno pueda seguir cediendo y la vivienda finalmente pueda desplazarse hacia la calle.
Según lo señalado por Olga Tavie, propietaria del inmueble, la propiedad quedó en situación de riesgo, haciendo un llamado a las autoridades a fin de que puedan intervenir y evitar una desgracia mayor.
En tanto que, Felisa Miranda, madre de la afectada, señaló también su preocupación por lo ocurrido